Llega la revista Disidentes de este mes con muy buen material: no os perdáis los poemas de Mario Lourtau López y Emilia Oliva García (dos extremeños) , de Dolors Alberola y Francisco Álvarez Koki; los inteligentes aforismos de Javier Salvago, los artículos, la música de Tina Turner -nuestra despedida a esta magnífica cantante-, las fotografías de José Lira sobre los ritos y simbología azteca, el ajedrez, así como los poemas recitados por Joros y Blanca Sánchez en nuestros podcast. Espero que os guste.
Mi artículo en esta ocasión versa sobre la poesía de Cesare Pavese ,notas al hilo de mi lectura de su poesía completa y de su diario «El oficio de vivir».
Mi agradecimiento a Revista Culturamas por acoger mi reseña de «Estaciones. Antología Poética» de Isabel De Rueda Rubiales, y por supuesto, a Jesús Cárdenas Sánchez, editor de la sección de poesía y también poeta, crítico literario y ensayista. Espero que os guste.
Aunque se indique en el cartel a las 19 horas, empezaremos a las 19.30 horas. En esta ocasión, el autor está en nuestra ciudad solo algunos meses al año, así que es una oportunidad única para hablar con él de poesía y de este último poemario, traducido por Natalia Carbajosa. Como me gustó mucho su primer libro en español, «Spanish Sketchbook. España en dibujos», publicado por Ediciones en Huida, estaba pendiente de su trayectoria. Veniros, que la entrada es libre y gratuita.
Curtis Bauer es catedrático de universidad, poeta, traductor y editor. Es autor de tres poemarios: Fence Line, The Real Cause For Your Absence y American Selfie. También es traductor de poesía y prosa del español, traducciones entre las que destacan Image of Absence, de Jeannette L. Clariond (The Word Works Press, 2018), que ganó el International Latino Book Award for «Best Nonfiction Book Translation from Spanish to English», Behind What Landscape, de Luis Muñoz y Eros Is More, de Juan Antonio González Iglesias. Ha impartido conferencias y talleres en español e inglés en Estados Unidos, Argentina, Ecuador, México, Venezuela y España. Es editor y redactor de Q Avenue Press Chapbooks y editor de traducciones de la revista literaria The Common. Divide su tiempo entre España y Texas.
En la página web de la editorial Vaso Roto se dice sobre Selfi americano: «Con un epígrafe de Sõren Kierkegaard iniciaCurtis Bauer su poemario: «El mayor de todos los peligros, perderse a sí mismo, puede ocurrir inadvertidamente en el mundo, como si no fuera nada». Y es que para este poeta el peligro yace en la distracción, en no darse cuenta. Por eso regresa lo ido, a un pasado que requiere ser revisitado. América, las distintas américas que conforman el universo de Bauer, se nos presenta en una crudeza llevada a la abstracción. Máquinas, manchas de petróleo, mares de tierra, salamandras, un mundo con atisbos de esperanza y su olor a jazmín. Aquí hay estaciones de una edad a la que Bauer regresa y se pregunta si la belleza es, si la justicia es, si el amor es, y si lo que muestra es lo que nos mantiene asidos a la patria.
Pensar en Bauer es pensar en la pintura de Giorgio Morandi: espacios, silencios, profundidades, barreras, límites. Al lado del padre Bauer el niño lee de modo distinto el trazo, la línea, la luz y su concomitante sombra. Sabe que el pretexto del arte es la cosa y que después de mirarla se transforma en algo más y después en otra hasta que signifique aquello que no es. De eso trata Selfi americano: es el ojo que ha dejado de ver la realidad para entrar en la visión. América, las distintas américas que conforman la poesis de Bauer, se nos presenta en una crudeza llevada a la abstracción. Máquinas, manchas de petróleo, mares de tierra, salamandras, un mundo con atisbos de esperanza y su olor a jazmín.
Onda que se borra en el estanque, la escritura de Bauer se diluye en su propia tinta, pero ahora sus trazos son más sólidos, más seguros para enunciar su incertidumbre. Ha dejado de lado sus vacíos, y se ha llenado de una luz recuperada en la casa de su infancia: ese espacio espiritual se hace más grande, invita a la contemplación.
“En este bello equilibrado poemario elegíaco, Curtis Bauer revisita lo sublime americano y lo rehace en estos momentos de penuria y desastres a través de una claridad digna y honorable. Bauer nos ofrece poemas de humana precisión y callado goce.” —Vijay Seshadri
En el programa «No es un día cualquier», de Radio Nacional de España, con Antonio Lucas, nos habla Curtis de este libro:
Con un estilo, que parece buscar la objetividad -descripción aparentemente objetiva de una escena o paisaje, a través de la cual se muestra , y generalmente denuncia, un hecho o situación-, narrativo, realista, donde predomina lo cotidiano, de gran visualidad y plasticidad -una cámara de fotografía o vídeo, recogiendo el más mínimo detalle- en largos poemas, profusos en su desarrollo y en tono confesional, nos retrata Texas y América, nos dibuja un retrato social y moral y cuestiona nuestra propia condición y humanidad.
En los poemas se habla en primera persona del singular. Aparece un yo -mayormente en su primera parte, más intimista- un sujeto que vive fuera de su país, en Buenos Aires, un lugar aún desconocido -después serán otras ciudades y países, pero siempre arrastra cierta nostalgia y sentimiento de extranjería- , y que se siente confuso, desorientado, perdido, solo, donde puede que recuerde su tierra y su infancia: Texas, una terra vasta de petróleo y cazadores, la luz de su casa natal, los amigos o amantes. Será un sujeto poco autocomplaciente, quien siente la pérdida de los amigos, pero sabe que mañana serán olvido, como se borra la huella y la onda de una piedra tirada al estanque.
Algunos poemas parecen recoger noticias de sucesos, como la violencia de género o el suicidio de un chico. Y cobran protagonismo personajes marginales : los vagabundos que duermen en la calle y que nadie parece percibir, el vecino borracho que cuelga a su perra de una soga para bailar juntos y la mata, trata la pobreza, el racismo. Escenas duras y posibles, si no reales. Sin embargo, no todo es crudeza, hay dulzura y delicadeza cuando se habla de amor y belleza, la belleza del abrazo de un ser querido -en su poema Lo que la belleza es, es-, o por ejemplo, en Amar a esta mujer: tres movimientos, nos dice:
«…O puedo tomarte de la mano, perderme
en el rastro de tus dedos y seguir
la cartografía de tus venas de la punta al arco del brazo,
como una vara de zahorí en busca
de un chorrito, de un manantial subterráneo
que se abre a cierta profundidad
y forma un arroyo, un río,
un océano en tu interior.
Hasta allí quiero ser arrastrado».
Un estilo ecléctico el suyo, mezcla de narratividad con simbolismo, sugerente, cuyos poemas se abren a la interpretación del lector, a quien hace pensar, sin duda, y cuya conciencia agita.
En su segunda parte la denuncia se intensifica, mostrando la infamia: explotación laboral, inmigración, los migrantes subidos a las vallas, la represión policial, la situación de los ilegales, los abusos sexuales a menores, historias de violencia y hombres violentos, el asesinato de una niña… En definitiva, nuestra maldad y monstruosidad.
Alrededor del deseo, del amor y desamor ronda principalmente su tercera parte, sobre su belleza y sobre la existencia de lo bello, o su ausencia. Nos muestra en este texto, en suma, lo bello y lo terrible.
Selfi en el polvo
Hay una luz que amo, que amaba
en la casa donde nací.
Tras la puerta se inundaba el zaguán
de la luz oblicua que brillaba en
cascadas de partículas que allí
se remansaban, luego estallaban, se inflaban
y avanzaban flotando como si
tuvieran un sitio a donde ir,
donde caer a kilómetros de distancia
o salir de la ciudad como yo mismo
haría después, aunque no supe por qué
bañado allí entonces en el polvo
revuelto que formaba remolinos, bullendo
en esa luz y calor hasta formar
el abrazo de un cuerpo que se abriera
sobre mí y me rodeara, un niño
alentado por la fuerza de ese espacio,
armado de valor para entrar
en ese borboteo y ese baile
en manos del polvo. Mis manos
entretejidas en él, tomándolo
y tocándolo. Abrazados. Aprendí
en qué parte de la luz me convierto
al flotar y al girar, cómo
me elevo desde el suelo,
y salgo, y sigo más allá.
—
Selfi americano
Quién es el hombre, pues solo puedo imaginar
un hombre, que tocaría a una niña,
que desnudaría a esa niña, que
la haría agacharse y
la haría agacharse
y la penetraría y a él y a él
y a ella y se dirigiría a la madre
de este o de aquella, la cual,
atada con correas a una silla, se quedaría
tan inmóvil como las sillas, tan vacía como las sillas
en las que otras madres no quieren sentarse,
aunque lo harán, obligadas a mirar
en silencio como lo hacemos en el cine o en un museo,
qué es el hombre que pareciera sonreír
a esas madres mientras penetra a aquel niño o a esa niña,
pero no y no a los niños que ahora
estarán vomitando en silencio tras llorar hasta que no
les queden lágrimas, si no fuera por la cámara que sostiene
otro hombre detrás de esas madres, que hace fotos, instan
táneas para enseñar a los amigos de vuelta a casa,
a la familia guardados en una caja de zapatos que un día,
cuando ese hombre sea viejo, haya olvidado lo que ha hecho,
porque esta raza de hombres puede olvidar lo que ha
hecho, abrazará a los hijos de sus hijos, que un día
descubrirán esa caja llena tan peculiar en un armario, si entonces
aún existen los armarios y las cajas y las fotos,
la bajarán por puro aburrimiento, la abrirán y verán
lo que su abuelo, lo que sus amigos y su
abuelito hicieron por puro aburrimiento
en nombre de su país.
—
Otra mujer a la que amé
Fue amargo: la lluvia caía a cántaros sobre nosotros,
los dos más madrugadores que esperábamos en la cola fuera
de la Galería Nacional del Retrato. Como una
riada; como una película (¿Por qué quieres vivir allí?
Preguntó mi hermano. Llueve todo el tiempo); e
Igual que en las películas, yo llevaba paraguas
y ella no, era guapa y yo no,
quería practicar su inglés ya perfecto,
entendía a su cuerpo con exactitud, y yo no.
Hice un gesto, extendí el paraguas hacia ella
y me tomó del brazo, esperamos juntos,
sin hablar del tiempo ni de que los dos
éramos de fuera, sino de los olores familiares
que añorábamos y de la última vez que los sentimos
aquí, o del té amargo al que no nos acostumbrábamos.
Tal vez reímos y yo fui más consciente
de su cuerpo junto al mío. He contado esta historia
muchas veces; algunas mujeres se quedan dentro de un hombre;
su belleza, por supuesto, era espectacular
y yo no merecía estar tan cerca de ella -su
aplomo- aunque estaba calada hasta los huesos.
Fue su presencia inesperada, mi brazo
fue una puerta que agarró y abrió,
su mano la llave; fue
el pequeño espacio seco y la conversación
que compartimos; no se alejó
cuando entramos, sino que me esperó en un banco,
y yo no me apresuré por una sala llena, digamos,
temblando con su perfume aún en la camisa,
el recuerdo de su brazo rozando mi cadera,
balanceándose. Había ido a ver cuadros
y a escribir a otra mujer.
Ella ya no me quería y yo
no lo quise ver. Lo he postergado durante años, pero ahora veo
que encontré una pista, o se me concedió una aquella mañana
y tarde en el centro de Londres. Pasaría
otro día con ella, escucharía su voz en el teléfono
dos veces, y luego se marcharía. Hace veinte años
me bebí el té y me inquieté al otro lado de la mesa
por ella, que me cogía las manos; nunca nos volvimos a ver
aunque hicimos planes para un fin de semana juntos…
Podría tener un hijo o una hija que hablaran
un idioma que no conozco, un nieto risueño,
recién nacido y suave, que oliera a leche y calentito
en París o en Dubrovnik. Cada dos años me acuerdo
de ella, me pregunto cómo encontrarla, si todavía
canta, si está viva, y una vez intenté escribirle.
Sólo hice eso. Nunca compartimos una habitación en Ljubljana,
ni nos vimos en Venecia, ni nadamos desnudos en el Adriático.
He vuelto a pensar en ella esta mañana.
Todavía siento el brazo de esa mujer entre el codo
y el pecho. El recuerdo se agranda, se dulcifica.
No son tantas las mujeres que he amado. Le di
a esa mujer la mitad de mi que no estaba en uso.
Con lo que ahorré, compré esto: la pera de Anjou,
una taza de café, esta mesa roja. La seguí,
ansioso y feliz. Me gané este recuerdo. Seguro que suena
tonto. Su linda cara. Su mano apretada
con la mía. Veintitrés gotas de lluvia en su pelo.
—
Ayer tuvimos la ocasión y el gusto de compartir poesía y conversación con Curtis Bauer, profundizando en su poemario «Selfi americano». Le estamos muy agradecidos, resultó de gran interés humano, y por supuesto, literario. Desde luego, no se pierdan la posibilidad de escucharlo hoy a las 19 horas en el Aula de Grados de la facultad de Filología.
Os dejo algunas fotografías, realizadas por Gregorio Dávila de Tena y por Rafael García Organvídez.
Mi agradecimiento a la revista Sonograma por incluir en su Suplemento Quadern de llibres mi reseña del poemario «Réplica» de José de María Romero Barea, escritor, crítico, traductor y profesor. Espero que les guste.
Llega la revista En Sentido Figurado de Marzo y Abril de 2023 y con ella mi reseña de la novela «La Casa» de Elena Marqués Núñez , cuya lectura aconsejo. Parece ser que la revista tiene algún problemilla en la web y lo están resolviendo; en tanto, os envío este enlace, en cuya página 38 podréis leer la reseña, que espero os guste.
Elena Marqués, quien también escribe cuentos y poesía, es autora de las novelas El último discurso del general Santibáñez, Versos perversos en la cubierta azul del Mato Grosso, El largo camino de tus piernas, Año sabático, El juego de la invención y en 2022 ha publicado su esperada y nueva novela, La casa. La reseña empieza: “Que parte de la Historia no sea sino leyenda no resta valor a la verdad…”, con esta frase comienza La casa, una narración que nos atrae, cautiva y entusiasma. Su prosa muestra dominio y riqueza del lenguaje, su estilo -impregnado de lirismo en un tono coloquial- seduce e incita a continuar, sin perder la intriga o las intrigas en ningún momento…» . Espero que les guste mi lectura, porque la novela seguro que la disfrutarán.
Se ha publicado igualmente en el nuevo número de la revista Disidentes, mayo de 2023, en su página 22:
Como nos tiene acostumbrados José Mateos, podemos disfrutar de la belleza y de su lirismo en poemas depurados y esenciales y necesarios. Ante el enorme contraste entre la parte de » Dentro» -sobre el cuerpo y su dolor y lo terrible de enfrentarse a…,- y » Fuera», -el milagro de la vida-, siempre su llamada a la felicidad con placeres sencillos, y gracias al amor y a la amistad, todo un tesoro. Un canto a la celebración.
«cantando una vez más la luz de marzo/ y el roce de mis pies sobre la hierba.»
Comparto la Revista Disidentes del mes de febrero. Viene con interesantes artículos de opinión, buenos poemas, preciosas fotografías de Rosario Muñoz , mi artículo «Diálogo entre teoría literaria y poesía» (en la página 32), podéis además escuchar los estupendos poemas de Juan Orozco, da gusto oír lo bien que recita y mucho más. Espero que lo disfruten.
Os dejo en esta casa un poema de la poeta valenciana Berta García Faet, perteneciente a su libro «La edad de merecer»(2015), publicado por La Bella Varsovia. Caigo en la cuenta del importante papel de esta editorial cordobesa al dar espacio a una poesía joven que no sigue los cauces tradicionales o imperantes y que suelen ser poetas muy potentes como Raúl Quinto, Gonzalo Hermo , Luna Miguel o Mario Obrero. Esta editorial fue considerada como «piedra angular de la poesía española» por la revista digital Publishing Perspectives, centrada en el análisis internacional de la edición. En noviembre de 2021 se integró como sello en la editorial Anagrama, continuando Elena Medel como directora. Normalmente, al menos hasta ahora, siempre un libro de esta editorial me ha ofrecido asombro y ha despertado mi interés, aunque mi estética o poética esté lejos de coincidir.
Aquí el poema:
1. aunque yo hablara todas las lenguas de los hombres y de las mujeres y de los ángeles si no tengo amor soy como una campana que resuena soy como un címbalo que repiquetea
el sonido revolotea alrededor del objeto sin lograr trascenderlo no apruebo del todo esta metáfora sin embargo es un lugar común y esta historia de amor es un lugar común y un cursus honorum al final del camino vendrá el olvido estará el prestigio de la supervivencia estará la paz habré crecido tal vez algo se iluminará desde el punto de vista espiritual tal vez algo se iluminará cuando se apague el fuego
así como el sonrojo se atasca entre la piel y el fuego así el sonido rojo del amor no encuentra palabras por eso digo rojo oscuro
pronuncio palabras pero no digo palabras porque soy como una campana soy como un címbalo rojo oscuro como el bronce que arde y como los desgarramientos de los tendones después de la desbandada de los signos y como los traqueteos o como los traquidos o como las tracas de las aortas ya sé que esta enumeración no ha sido muy sugestiva no obstante me parece pertinente insinuar tímidamente que solo el amor conecta significante y significado solo el amor habla solo el amor consigue que mi solemnidad no resulte 100% 150% 200% ridícula
2. aunque tuviera el don de la profecía y conociera todos los misterios y todas las ciencias aunque tuviera toda la fe una fe capaz de trasladar montañas una fe capaz de traducir montañas y desbandadas de aves emblemáticas del imaginario bíblico del imaginario romántico de finales del s. XVIII principios del s. XIX si no tengo amor no soy nada
en este sentido aunque yo hablara todas las lenguas de todos los tiempos y de todos los lugares aunque yo fuera una ciudadana de éfeso como tal vez pablo de tarso llegó a ser un ciudadano de éfeso aunque yo escribiera poemas de amor que hicieran justicia a esta historia de amor y de delicadeza y de paroxismo expresivo 57% o 44% ridículo lo cierto es que tú y yo robamos todo el vino y toda la miel y todos los árboles de éfeso y propongo suponer que anochecía
en este sentido el signo es arbitrario y se desperdiga en desbandada pero nos salva el amor el amor ensambla el amor une el amor junta a las cosas esto es esencialmente lo que quiere decir el apóstol
por eso si no tengo amor soy una adolescente soy una anciana del mundo lo siento no te lo dije pero quería tener 2 o 3 hijas contigo
3. aunque repartiera todos mis bienes para alimentar a los pobres y entregara mi cuerpo a las llamas si no tengo amor no me sirve de nada de absolutamente nada si no tengo tu amor
si no tengo amor y si no tengo tu amor soy como el tartamudeo de los cactus y de las flores de los jardines súbitamente desaliñados y perdidos y perdedores como todos los perdedores de todas las historias lo siento no te lo dije pero quería que nos tatuáramos algo verdadero y pasional y más bien grotesco y rojo oscuro para reírnos para desternillarnos cuando tuviéramos 57 y 44 años
en este sentido recuerdo muy bien que no regamos muy bien las plantas antes de viajar a lanzarote y propongo suponer que amanecía
traigo a colación este hecho porque me acuerdo de nosotros me acuerdo de mí me acuerdo de ti cada vez que me sale un pop-up de publicidad de lanzarote cada vez que busco en un diccionario on-line palabras que pronuncio y que no entiendo cada vez que imagino un anochecer o un amanecer a través de un ventanal rojo oscuro porque soy como una campana soy como un címbalo completamente oxidado o resquebrajado cada vez que algo no se ilumina desde el punto de vista espiritual
4. el amor es paciente es servicial el amor no es envidioso no alardea no se envanece
recuerdo muy bien el anochecer y el amanecer en un balcón en otro balcón y en otro balcón en el mundo polvoriento y rubio de lanzarote
esto es esencialmente la nostalgia
hay un reportaje gráfico de esto
es la cuarta vez que utilizo en este poema de amor la palabra “mundo» y normalmente me gusta repetir las palabras un número de veces impar casi siempre 3 o 5 o 7 veces al final del camino vendrá el olvido lo dicen todos yo no les creo
5. el amor no procede con bajeza no busca su propio interés no se irrita no tiene en cuenta el mal recibido
aunque tuviera toda la fe si no tengo amor no tengo textura no tengo dimensión no tengo color el sonido no revolotea alrededor de mí porque ni siquiera soy un objeto si no tengo amor y si no tengo tu amor pero no sé si apruebo esta metáfora del todo la gloria y la aniquilación a veces coinciden lo dicen todos yo no les creo
si no tengo amor no puedo sacudir cráteres como abanicos seductores y pintorescos y partículas arenosas como llovizna y saxofones como convulsiones y fiebres incurables ni dividir océanos como hogazas de pan y números formidables y tristezas ni preparar una deliciosa cena muchas frutas de temporada alegoría de algo
aunque tuviera toda la fe si no tengo amor soy como una campana soy como un címbalo agujereado o hueco o rojo oscuro como una tormenta de verano en el autobús esperando el autobús o esperando el ferri
escribo este poema esperando el autobús recordando muy bien el ferri de lanzarote y aunque tuviera el don de la profecía y viera todo lo que temo y viera todo lo que deseo ¿qué pasa si tengo toda la fe si tengo todo el amor si me niego a ser nada si todo lo que temo y todo lo que deseo son el mismo objeto la misma campana el mismo címbalo es decir la misma cama matrimonial oxidada o resquebrajada el mismo fuego el mismísimo fuego?
6. el amor no se alegra de la injusticia sino que se regocija con la verdad y la verdad la verdad sea dicha te quiero aún
de nada de absolutamente nada de nada sirve ya dormir en una tienda de campaña a la orilla del mar y ser gitanos y ser hippies si no tengo tu amor si no tengo tu amor de nada sirve ser pobre y soy muy pobre y de nada sirve tener un cuerpo pobre y rico si no tengo tu amor de nada sirve la belleza de nada sirve la llama
lo peor de todo es que no sirve la llama
soy como un címbalo agujereado o hueco o rojo oscuro soy como una campana enferma que toca una campanilla o una campana para anunciarse a sí misma su muerte su hoguera su carbonización escasamente estética
7. el amor todo lo disculpa todo lo cree todo lo espera todo lo soporta
soy como una metáfora semítica como una flor o como un cactus como las ascuas de una flor o un cactus
lo peor es que soy como unas ascuas
robamos todo el vino toda la miel todo el fuego sin duda todas las frutas de temporada alegoría de algo que sin duda crecían en nuestras bocas como si nuestras bocas fueran tierra y no tierra quemada por el fuego
lo siento no te lo dije pero es verdad que tengo 2 años de edad es verdad que tengo 2.000 años de edad
8. el amor no dejará de ser las profecías acabarán el don de lenguas terminará las ciencias desaparecerán
29 km2 de resurrección y volcanes
100% 150% 200% de solemnidad y ridículo
confía en mí sujétame estoy cayendo muy rápido
anochecía y amanecía en la terraza en el portal en la misma cama matrimonial de aquel hostal de éfeso
9. porque nuestra ciencia es imperfecta y nuestras profecías son muy limitadas
esto es esencialmente una inminencia una amenaza una amenaza
esto es esencialmente lo que quería pronunciar y no decir el apóstol
en algún lugar en algún tiempo pronunciaré y diré una palabra tan kitsch y obscena inminentemente y escribiré y diré un tratado filosófico tan kitsch y obsceno y un poema tan kitsch y obsceno que pablo de tarso se revolverá en su tumba inminentemente como un maelstrom como un brusco vómito de mujer joven embarazada como una nube y sufrirá inminentemente y se indignará hasta la extenuación y tú y todo el mundo y yo bailaremos bajo una granizada tóxica de azúcar y de viento y de ojeriza y de silencio y bajo una repentina corriente de aire fuerte y alegre estará la paz habré crecido volveré a verte sin nada sin absolutamente nada sin nada ya que perder
10. cuando llegue lo que es perfecto cesar lo que es imperfecto
el amor es un cactus y el amor es una flor y seguirá creciendo y seguirá envejeciendo y seguirán pasando los tiempos y los lugares y yo habré crecido aunque nosotros no los veamos porque en algún lugar estarán esas 2 hijas porque en algún tiempo estarán esos 2 tatuajes 100% 150% 200% ridículos
será el mundo como una campana ahí arriba eternamente en éfeso y será el mundo como un címbalo aquí abajo eternamente golpeándose y abofeteándose y golpeándose dentro de aquel corazón púrpura que encontré tirado en una callejuela de lanzarote y que ahora llevo colgando en un collar como un fósil alias cadáver pero yo profeso mucho la doctrina de la metempsicosis
mientras te amé fui un niño fui una niña siempre seré joven siempre seré una mujer joven embarazada siempre serás joven siempre robaré todo el vino que se acumula en las copas y en las venas y en las fuentes siempre te escaparás de la muerte como en una desbandada de montañas y desbandadas de personas que ya no te quieren casi nada y de signos que se agitan como personas que ya no te quieren casi nada cuando vas a darles un beso
11. mientras yo era niño y niña hablaba como un niño y niña sentía como un niño y niña razonaba como un niño y niña pero cuando me hice hombre y mujer y ángel dejé a un lado las cosas de niño y niña y hombre y mujer y ángel
estamos cara a cara como en un espejo
hay un reportaje gráfico de esto
cara a cara nos conoceremos tú a mí y yo a ti nos conoceremos cuando veamos el reportaje gráfico de nosotros contra los espejos cara a cara nos conoceremos como nos conoce Dios cara a cara sustituiremos a Dios a los ojos de Dios por el sonrojo amante por las ascuas por los ojos amantes por los ojos del zoom de la cámara por el fuego por todo lo que se consume en el fuego como si fuera fuego
12. ahora vemos como en un espejo confusamente después veremos cara a cara ahora conozco todo imperfectamente después conoceré como Dios me conoce a mí o sea perfectamente
sé que es mentira pero avivamos el fuego
sé que probablemente es mentira o fe o esperanza o amor pero avivaremos el fuego confía en mí 100% 150% 200% avivaremos el fuego estoy cayendo muy rápido por el tobogán rojo oscuro de los volcanes pero no encuentro por ningún lado ninguna resurrección 29 km2 de regresión infantil por favorquiéreme y ridículo
en una palabra ahora existen 3 cosas la fe la esperanza y el amor
13. en una palabra ahora existen 3 cosas la fe la esperanza y el amor pero la más grande de todas es el amor
y el fuego
soy como una metáfora semiótica no sé si estoy a gusto no sé si apruebo del todo esta metáfora del todo
lo siento no te lo dije aunque lo intenté no soy creyente pero tengo toda la fe toda la esperanza todo el amor creo que la biblia es tan hermosa creo que la biblia es una muchacha tan hermosa y creo que tú eres un muchacho tan hermoso y creo que nuestro amor sin idioma y sin biblia y sin bebés es tan hermoso y doloroso que tú deberías salir en la biblia y creo que nuestro amor debería salir en la biblia para que si lo olvidamos si se nos acaba la fe si algo va mal alguien de lanzarote o de éfeso pueda leerlo y se acuerde de nosotros ciudadanos de la trascendencia revoloteadores de los objetos sagrados de las islas septentrionales y de las localidades antiguas del asia menor cuando suenen las campanas y los címbalos enmohecidos y cuarteados creo que deberíamos reescribir la biblia para que si olvidamos nuestro amor y nuestra historia de amor alguien de lanzarote o de éfeso rece por nosotros con mucha pompa y con mucha energía en alguna iglesia o en alguna playa o en alguna cima de lanzarote o de éfeso así que estoy reescribiendo la biblia para que alguien rece por nosotros se acuerde de nosotros y lea y memorice la historia de nuestro amor y se reúna con sus amigos en memoria nuestra nuestro amor lo siento es un lugar común pero se nos acaba el tiempo no hay ningún lugar al final del camino te encontraré quiero encontrarte al final del camino rojo oscuro te encontraré confía en mí estoy cayendo muy rápido al final del camino vendrá el olvido tal vez estará la paz tal vez habré crecido al final del camino algo se iluminará desde el punto de vista espiritual pero te lo suplico no apagues el fuego soy el mismísimo fuego te lo ruego te lo suplico no me apagues
Berta García Faet, La edad de merecer (Córdoba: La Bella Varsovia, 2015), 97-105
Ha salido el nuevo número de la revista literaria y artística «En Sentido Figurado» Mayo/ Junio 2022 repleto de buena literatura: entrevistas, ensayos, microrrelatos, cuentos, reseñas, poesía ( incluida poesía visual)… Un trabajo encomiable siempre el de estos grandes amigos.
También han dado espacio a mi reseña de la novela » Lluvia oblicua», de Manuel Moya, que versa sobre los últimos momentos de Fernando Pessoa, un retrato y homenaje entrañable y tierno.